Shepard Fairey, artista callejero, activista y empresario
Shepard Fairey, es un artista urbano y diseñador gráfico que se dio a conocer al mundo en 2008 con un retrato titulado “Hope“ del entonces candidato a presidente Barack Obama.
Este controvertido personaje es un activista y provocador que llama la atención con sus obras sobre el abuso del poder, la propaganda, la xenofobia, la vigilancia del Estado e incluso el cambio climático.
¿Quién es Shepard Fairey?
Shepard proviene de la cultura skater estadounidense y ganó fama con la creación de la campaña Andre the Giant Has a Posse con la cual irrumpió en el mundo del arte. Lo que al principio fueron una serie de pegatinas callejeras sin contenido, con el tiempo se convertiría en un cuestionamiento al sistema y al entorno en el que vivimos.
Esta campaña se denominó Obey y fue pensada como un experimento de fenomenología. De esta forma se invita al espectador a pensar, a cuestionarse y a reaccionar sobre su entorno.

Actualmente Shepard Fairey, cuenta con una carrera de 25 años y más de 1200 obras. Dichas obras están diversificadas en plantillas, serigrafías, ilustraciones de rubylith, collages, obras en madera y metal, posters de grandes dimensiones, lienzos y adhesivos.
Si bien utiliza diferentes estilos, la mayoría de sus obras son una mezcla de caricatura con el estilo del cómic y el arte pop fusionado con la estética de la propaganda política de los años 70s, en especial la cartelería rusa de la era comunista.
Entre sus principales creaciones podemos mencionar “Obedece, consume y repite”, “Gran Hermano te está vigilando”, “Nunca confíes en lo que ves con tus propios ojos, cree lo que te dicen”, “La sociedad para la preservación de la destrucción” o “Bienvenido visitante”.
La vida personal del creador de Obey
Frank Shepard Fairey nació el 15 de febrero de 1970 en Charleston, Carolina del Sur, Estados Unidos. Creció en un entorno donde el punk y el rock cargaban contra el sistema y los jóvenes se levantaban contra el conformismo, la opresión y la corrupción política.
La cultura skate surgida en los 80s, invitaba a la reutilización de los espacios. Así dió inicio a la cultura de los graffitis y esto fue el puntapié para el nacimiento de la faceta artística de Shepard.
Mientras trabajaba en una tienda de skates, hizo sus primeros diseños urbanos de arte callejero con pegatinas y pósters. Posteriormente estudió diseño gráfico en la Escuela de Diseño de Rhode Island y desde un principio luchó por el reconocimiento del arte urbano.
Su trabajo como artista y activista
Poco a poco sus obras se fueron cargando de críticas al sistema como el control del Estado, las guerras, la destrucción del medioambiente, el poder del dinero o los abusos de las empresas. Aunque también los más sociales como el racismo y la xenofobia.
De esta manera Sherpard Fairey se fue convirtiendo en un referente e icono de la cultura popular urbana. Sus obras se encuentran tanto en museos como en muros, edificios o estaciones de trenes en ciudades de todo el mundo.

Según sus propias palabras, “Su trabajo es cuestionar el poder y crear mecanismos para luchar contra el abuso del poder“. Esta denuncia permanente realizada mediante trabajos callejeros es lo que le ha generado más de 18 detenciones en diferentes países, acusado de vandalismo.
A lo largo de su carrera su estilo atravesó diferentes etapas. Cuando nacieron sus dos hijas se inclinó por una estética “menos masculina y agresiva” con motivos más florales.
Actualmente Sheppard se dedica al diseño gráfico en su estudio BLK/MRKT Inc (BlackMarket) que fundó junto a Dave Kinsey y Phillip DeWolff. Allí se decican a crear ‘Marketing de guerrilla’ para grandes marcas como Pepsi, Adidas, Hasbro, Epitaph y Netscape. También posee su propia marca de indumentaria enfocada en los jóvenes.